Susana Solís Esquinca /F&S
Juan Antonio Villatoro Herrera, que desde ahora deberá llamársele Juan Antonio “N” es el primer alcalde vigente que es arrestado, de una larga lista de munícipes que pesan sobre sus hombros la sospecha de estar coludidos con los grupos criminales.
A Juan Antonio “N”, sus propios paisanos lo señalaban por ser el líder de unos de los dos grupos de la delincuencia organizada que se disputaban esta zona desde hace más de tres años y que fue dejando una estela de víctimas mortales.
¿Dónde esta Aníbal?
Ahora que fue aprehendido por varios delitos, entre estos el presunto vínculo con estas bandas, seguramente mucho tendrá que decir sobre el paradero de Aníbal Roblero Castillo, alcalde que ganó las elecciones en Comalapa pero que el 3 de septiembre pasado fue levantado en una cafetería de Tuxtla Gutiérrez y quien hasta el momento -pese al ruego de los familiares- se desconoce su paradero.
El ahora detenido parecía que presentía las consecuencias de sus actos porque en su última entrevista que dio se notaba nervioso, no obstante se desgranó en halagos al nuevo gobierno, publicó fotos con autoridades de seguridad tratando de congraciarse; pero como lo dijo en su momento Eduardo Ramírez “no habrá impunidad para nadie”. La palabra se convirtió en hechos y hoy Juan Antonio “N” se convirtió en primer edil en caerle la guillotina y mucho tendrá que hablar dentro de El Amate.
3 golpes en 72 horas
La Fuerza de Reacción Inmediata Pakal ha golpeado en donde más les duele a las bandas criminales: insumos, equipo y materiales.
En Frontera Comalapa se aseguró lo que era un taller para construir los vehículos llamados “monstruos” cuya función era causar terror y enfrentarse a los grupos rivales y a las mismas fuerzas del orden. Ahí se decomisaron 5 de este tipo de unidades.
Otro golpe fue en Mazatán, en la Barra San José, donde era conocido por todos el trasiego de droga y migrantes; ahí se aseguraron cinco lanchas con sus respectivos motores fuera de borda.
En ambos casos, se aseguraron armas, cartuchos, droga, explosivos para drones y demás equipo que utilizan estos grupos. La estrategia es desmantelarlos para evitar una reacción a gran escala.
Veremos que pasa en las siguientes semanas, pero lo definitivo es que este gobierno estatal va en serio, de frente, no se quita, y el efecto sorpresa continuará…
That’s All.
